¿QUÉ PASA MIENTRAS TE AFEITAS?
Afeitarse es un proceso bastante agresivo para la piel de tu rostro. Cada corte de la hoja inflige daño, desgasta las capas externas de la piel y la deja indefensa contra infecciones y la irritación. Incluso, un afeitado perfecto viene con una buena cantidad de mutilaciones microscópicas.
A medida que la hoja de afeitar pasa por la superficie, la capa externa de la piel se elimina junto con los vellos. Al eliminar esta barrera protectora, la piel no sólo se deshidrata, sino que se vuelve más vulnerable a los gérmenes y bacterias. La hoja también puede causar microcortes invisibles, que deben repararse lo más rápido posible para evitar infecciones.
El bálsamo para después del afeitado recupera el daño causado por la hoja de afeitar. NIVEA MEN Silver Protection Loción After Shave te da una protección antibacterial y una rápida recuperación tras el rasurado. Los activos de un bálsamo para después del afeitado ayudan a reparar el daño al reconstruir la barrera protectora de la piel lo más rápido posible. Un bálsamo para después del afeitado no sólo desinfectará las raspaduras y cortes, sino que también ayudará a humectar la piel y aliviar cualquier irritación visible.